Dios nos dió una visión para que no tengamos que vivir por aquello que vemos, Él escoge diferentes maneras de llevarnos a donde necesitamos ir y muchas veces lo hace de la forma en que menos esperamos.
Por muchos años se ha profetizado sobre nuestro país que “Honduras será luz al mundo y punta de lanza” y ahora lo estamos viviendo al levantarnos y oponernos a un régimen que no es el más indicado para criar a nuestros hijos y no es ni parecido a la vida de Reino que nuestro Dios ha destinado para nosotros.
Escuchamos cada día las noticias y el futuro para nuestro país parece sombrío, pero debemos mantenernos firmes y confiados en que Dios tiene el control y mientras tanto refugiarnos y gozarnos en Él.
Estamos en las manos Dios y mi Dios tiene manos grandes y no nos va a dejar caer.
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