martes, 2 de agosto de 2011

TENGO UN SUEÑO

Por: Delmy Mejía de Herrera.
Cada situación que vivimos es una página más en el libro de nuestra historia, solia decir mi Pastor Roberto Marroquín, todo es parte del plan de Dios para tu vida, es parte del propósito, Dios te está formando en la áreas donde más serás de bendición para la gente.

Ha pasado el tiempo y ahora él ya no está con nosotros. Nuestro Dios lo quería tener más cerca de él, seguimos extrañándolo, nos sigue haciendo falta, pero nos damos cuenta que no somos las mismas personas que llegamos a Ministerios de Jesús. Lo digo por mí y por muchos hermanos que así lo expresan.

 Hace unos días hablaba con una hermana muy querida y me decía: tengo un sueño y sé que puedo hacerlo y lo haré y yo digo; tengo un sueño, sé que puedo hacerlo y lo haré y sí, no llegamos a Ministerios de Jesús por casualidad. Nuestro Dios puso sueños grandes en nosotros; puso sus sueños en nosotros y necesitabamos a una persona como nuestro amado Pastor que nos hablará de propósito y que nos enseñara con su forma de actuar que tenía una actitud diferente ante la vida.
Nuestro Dios está demandando mucho más de nosotros; mucho más que vestirnos bonitos para asistir a un culto de miércoles y de domingo--- eso está bién pues la palabra nos manda congregarnos. Nuestro Pastor decía: "no somos una iglesia de eventos, somos una iglesia de procesos".
Particularmente creo que Dios puso en nuestro camino a un hombre como él para enseñarnos que nuestra vida tiene propósito y el valor que tenemos. Ese, ese era su propósito. Marcar vidas y ¡despertar aguilas dormidas! El sembró tanto en nosotros y ahora, ¿que haremos con todo eso? ¿qué estámos haciendo por la gente? No me refiero sólo a palabras bonitas, ¿Qué acciones estamos llevando a cabo para decirle a la gente que tienen un Dios que los ama y que pueden seguir adelante?
  
Y es que iglesia no es encerrarnos en cuatro paredes. Eso es "meter a nuestro Dios dentro de una caja." Hay demasiada necesidad en la gente para quedarnos dando vueltas en un solo lugar; debemos AVANZAR; tenemos tanto dentro de nosotros... Ahora sabemos nuestro valor en Dios; sabemos que no es por la capacidad, talentos o habilidades que tengamos. Dios quiere corazones dispuestos. El resto lo hará Él con su gracia y favor sobre cada uno de nosotros. ¿Qué estamos esperando? Probablemente ud como yo, tiene luchas y debilidades, pero nuestro Dios dice:

Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad.
2Corintios 12:9
Tal vez suene duro, pero ¿Cuánto tiempo más nos quedaremos esperando recibir y llenarnos nosotros, cuando hay tanta necesidad afuera, niños abandonados, mujeres maltratadas, jóvenes desorientados, hambre, dolor, enfermedad, personas que han escuchado de un Dios que es bueno pero que no lo han conocido porqué no se los presentamos, no con palabras sino con acciones, no solo dándoles un pedazo de pan sino enseñándoles, capacitándoles, y por supuesto que un día querran hacer como nosotros porque entendieron que "cada situación que vivimos es una página más en el libro de nuestra historia. Todo es parte del plan de Dios para tu vida. Es parte del propósito."

¿Qué es lo que más te mueve? ¿Qué es lo que te apasiona? Tú como yo tienes un sueño y podemos hacerlo, no con nuestras fuerzas, sino con la fuerza y la gracia del Espíritu de Dios en cada uno de nosotros.

Dios le bendiga!